¿Qué es la Brecha de Género Financiera y cómo la cerramos?
La brecha de género financiera es la diferencia desigual que existe entre hombres y mujeres en cuanto a servicios y beneficios financieros, como también hablando específicamente de remuneraciones económicas por las labores realizadas.
Las mujeres estamos logrando un gran avance al posicionarnos en cada vez más sectores laborales, ocupar puestos de trabajo que antes eran exclusivos para el género masculino y ganar un salario menos disparejo.
Aun así, parece que el camino a la equidad financiera aún es largo, si miramos hacia los distintos componentes que engloban la función económica.
¿Cómo se distingue la brecha de género financiera?
Para entender la brecha de género financiera no es necesario entrar al fondo de cada empresa, pues a simple vista las diferencias que existen entre la participación de los hombres y de las mujeres.
Voltea a ver a tus compañeros de trabajo, conversa con tus amigos o habla con tus vecinos, incluso mira dentro de tu propio hogar: no obtenemos lo mismo.
La brecha salarial de género es uno de los principales factores que contribuyen a la brecha financiera en Colombia. Según el DANE, en 2022, las mujeres en Colombia ganaban un 15% menos que los hombres en promedio. Además, las mujeres tienen menos oportunidades de empleo y enfrentan mayores barreras para acceder a trabajos bien remunerados en comparación con los hombres.
La falta de acceso a servicios financieros también contribuye a la brecha financiera de género en Colombia. Según un informe del Banco Mundial, el 57% de las mujeres colombianas no tienen una cuenta bancaria y el 62% de las mujeres que trabajan en empleos informales no tienen acceso a servicios financieros. Esto limita su capacidad para ahorrar y acceder a préstamos para iniciar un negocio o para invertir en su educación.
Además, esta brecha en Colombia es aún mayor en las zonas rurales. Según el mismo informe del Banco Mundial, solo el 21% de las mujeres rurales en Colombia tienen una cuenta bancaria en comparación con el 47% de las mujeres urbanas.
La brecha financiera de género también tiene un impacto en la economía en general. Un estudio de McKinsey Global Institute encontró que si se cerrara la brecha de género en la fuerza laboral de América Latina, el PIB regional podría aumentar hasta en un 14% para 2025.
¿Cómo podemos cerrar esta brecha?
Para que logremos cerrar las diferencias que existen entre hombres y mujeres, primero es necesario darnos cuenta de que existen y de que incluso nosotras podemos fomentarlas o padecerlas.
Segundo, es fundamental hablar acerca del tema con las personas con las que nos rodeamos. ¡Así demostramos el valor que tiene la mujer en cualquier campo en el que se desenvuelva; dejamos atrás prejuicios y frenamos la discriminación!
Y tercero, se deben crear espacios en los que se trabaje el empoderamiento de las mujeres; convencer a las empresas de que la capacidad laboral de la mujer es la misma que la del hombre y que por esto es indispensable crear mayores oportunidades en el mercado laboral formal que las incluya.
Es vital seguir llevando el tema sobre la mesa para poder erradicar la brecha de género financiera. También es imprescindible acceder a educación financiera, para que toda mujer disfrute de su derecho a tener independencia económica.
Para más notas como esta, ingresa a nuestro blog. También puedes seguirnos en Twitter e Instagram para tener información al instante.